
¿Las palabras de Zapatero?: "Voy a ver la película, y además quiero que sepáis que no me olvido de vosotros".

NOS ESTAMOS MUDANDO A OTRO BLOG MUCHO MÁS COMPLETO Y CON MUCHAS MÁS POSIBILIDADES. PODÉIS ENTRAR POR www.migueljara.com o http://migueljara.wordpress.com/
Foto: Ávila digital
Nos recibió la ciudad amurallada, la de mayor altura de todas las capitales de provincia españolas, con la primavera en invierno tan característica de este tiempo "cambioclimatizado". La sala era la iglesia del Monasterio de Santa Ana, que se utiliza como salón de actos en la sede del Gobierno de Castilla y León en Ávila. Casi llena, con un público muy interesado en conocer quienes son y cómo actúan los grupos de presión empresarial o lobbies; gobiernos paralelos en la sombra.
Volvió a aparecer en escena el caso del medicamento Agreal de Sanofi-Aventis, por dos ocasiones, y en las dos recuerdo el gesto boquiabierto de las féminas cuando se enteraron de que este fármaco, utilizado para los sofocos de la menopausia, causa gravísimos daños en la salud de las mujeres. Bocas abiertas cuando expliqué que la primera sentencia de un juzgado -existen 4.000 demandas sólo en España- concluye que Agreal incita al suicidio, pero que en América Latina multitud de países siguen comercializándolo.
En fin, volvimos a repasar un fenómeno, el de hacer lobby, que crece al tiempo que la crisis de valores en Occidente y, que de no ponerle coto en breve, amenaza con terminar con lo poco que queda de democracia: la presión empresarial sobre la política coloca en el poder a las élites económicas.
El tema no es baladí pues en breve un bufete de abogados dirigido por un experto en derecho sanitario va a demandar al Ministerio de Sanidad y a los laboratorios fabricantes de vacunas con tiomersal por mantener durante decenios en el mercado estos preparados farmacológicos a sabiendas del daño que pueden producir.