viernes, 28 de diciembre de 2007

Noruega prohíbe la utilización del mercurio, también su uso dental

Las reacciones ante los peligros del mercurio se suceden. Si, como comentábamos en este blog, ciudadanos españoles de varias asociaciones de afectados por el mercurio van a presentar una denuncia en los juzgados en próximos días, hoy nos enteramos de que Noruega también ha prohibido el mercurio dental.

Muchos utensilios cotidianos como el termómetro contienen mercurio. Noruega no permitirá que se fabriquen con este elemento químico
El mercurio es un elemento químico que cuando aumenta su temperatura produce vapores tóxicos y corrosivos. Es dañino por inhalación, ingestión y contacto. Es un producto muy irritante para la piel, los ojos y las vías respiratorias.
El Gobierno noruego ha anunciado que a partir del 1 de enero de 2008, prohíbe en su totalidad la fabricación de objetos que contengan mercurio así como su importanción y exportación.
El ministro de Medio Ambiente de dicho país ha explicado que el mercurio es uno de los agentes contaminantes más peligrosos y que existen alternativas no dañinas a su utilización.

El mercurio no es biodegradable por lo que es muy contaminante
La denominada Petición de Luxemburgo persigue la prohibición internacional del mercurio en los empastes dentales de amalgama, ya contemplada por el Gobierno noruego. La asociación española Mercuriados ofrece más información al respecto y recoge firmas para apoyar dicha Petición.

jueves, 27 de diciembre de 2007

El costo del bienestar, químico

Cuando hace ya tres años rodamos el documental Carga tóxica,(Documentos TV, La2 de Televisión Española) descubrimos, al menos yo, un nuevo mundo de enfermedades medioambientales. Graves dolencias que incapacitan cada año a miles de personas, que las marcan de por vida; provocadas por las sustancias químicas tóxicas que existen en nuestro medio natural -o no tan natural, claro-.Como explica el presentador de dicho video, significa, al menos en parte, "el costo del bienestar", químico en este caso.
Existen 104.000 sustancias químicas liberadas en el medio ambiente y muchas de ellas está comprobado que son muy nocivas para nuestra salud
Me refiero a las ahora bastante conocidas fibromialgia, Síndrome de Fatiga Crónica y, sobre todo, al Síndrome Químico Múltiple (SQM). Hicimos decenas de entrevistas personales para dicho trabajo documental y las personas afectadas por los contaminantes ambientales se quejaban de los mismos males.
Hoy se están publicando cientos de trabajos científicos sobre ellos y muchos médicos ya los diagnostican con cierta precisión, pero todavía las personas que los sufren están condenadas. No sólo a padecer las múltiples dolencias que acarrean estas enfermedades -provocadas además por varias causas al mismo tiempo- sino también al ostracismo.
En gran parte por la propia Administración, a la que no le conviene reconocer la existencia de estas personas, que enferman por el simple hecho de vivir en una sociedad que ha sacrificado todo al "progreso tecnológico" y a un bienestar antinatural.
De reconocerlas, además de gastar millones de euros en las ayudas que merecen, se estaría deslegitimando el propio modelo económico en el que es tan importante el sector químico -químico tóxico, diría yo-.
Tuvimos oportunidad de sufrir ese poder en nuestras propias carnes tras el rodaje de Carga tóxica, que tuvo que rehacerse varias veces por las presiones de ciertas compañías químico-tóxicas para que hiciéramos una versión light del documental. Pero eso ya lo contaremos en próximas ediciones de este blog, estad atentos.
El propio modelo económico está impulsado por el sector químico-tóxico y cada vez son más patentes los impactos que genera en la salud y la ecología
Un ejemplo de todo esto es la página que el Ministerio de Trabajo español dedica en su web a la Sensibilidad Química Múltiple. Como los propios afectados comentan: "está llena de 'sospechas' hacia la SQM, cuando no directamente la niega". Cuestiona la enfermedad desde el principio del texto, por ejemplo entrecomillando la palabra "enfermedad", referida a este síndrome, u obviando las conclusiones del Congreso de Medicina Ambiental de Brunete (Madrid), celebrado en junio de 2007, en el que quedó patente la dimensión del problema.
Esta página del Ministerio relaciona de manera algo confusa la SQM con un "trastorno psiquiátrico". Sin querer hacer diagnóstico, que no es mi terreno pues yo soy periodista (no médico), lo cierto es que buena parte de los doctores, quizá por desconocimiento del tema, diagnostican a estas personas enfermedades mentales donde las hay ambientales (generando con ello incluso mayores problemas a los pacientes al tratarlos con peligrosos medicamentos que pueden agravar sus dolencias).
Esta es una de las constantes quejas de los afectados por estos trastornos (protesta que sí refleja el autor de la página, Jordi Obiols Quinto, licenciado en Biología y Farmacia). Una afectada de Madrid, María José, comenta al respecto: "Parece increíble que su autor sea el mismo que, en sus textos fuera de la web del Ministerio (e incluso dentro de otras páginas de este) no cuestione la SQM en ningún momento, dándole la justa categoría de enfermedad, y en concreto, de enfermedad laboral".
Esta persona aporta dos ejemplos: NTP 595: Plaguicidas: riesgos en las aplicaciones en interior de locales (pinchar el enlace y buscar en el texto la palabra "sensibilidad química múltiple"), y Más malos que la peste: plaguicidas de uso ambiental, un riesgo grave y poco conocido (pinchar el enlace. En él se habla específicamente de la SQM en el punto 1.8 como Síndrome de Hipersensibilidad Química. El documento forma parte de la revista "Mujeres y Salud" nº7).

Muchos productos que se utilizan de manera cotidiana en el hogar pueden hacer la vida imposible a los habitantes del mismo

A día de hoy, los afectados por SQM continúan sin existencia "oficial" y por tanto sin derecho a ningún tipo de ayuda ni reconocimiento. De algún modo, no conviene reconocerlos pues costarían mucho dinero. "Todo esto sí que conlleva para nosotros un cuadro psiquiátrico de depresión como reacción a la muerte social a la que nos vemos relegados, sobretodo por este tipo de des-información oficial a médicos, evaluadores del Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) o asistencia social".

martes, 25 de diciembre de 2007

Navidades sin médicos en venta

Estas ya no podrán ser unas navidades sin médicos en venta pero las próximas quizás sí. En enero va a presentarse una nueva asociación de profesionales sanitarios que quieren incidir y cambiar las relaciones entre la industria farmacéutica, la Administración pública y los de su gremio. Están hartos de ver cómo se degrada su oficio día tras día a mayor gloria de los intereses de los laboratorios y de los profesionales de la salud corruptos.
La plataforma, cuyo nombre desvelaré un poco antes de su presentación -pero que ya adelanto que no son nada "agradecidos"-, parte de la asociación de más de 80 médicos, enfermeras y farmacéuticos. Irá en una línea similar al trabajo que realiza el movimiento internacional Nofreelunch y sus filiales, como la italiana No Gracie, Pago Io.
En España hay laboratorios que compran a los médicos con dinero para que receten sus productos
El principal problema, que no el único que encuentran estos profesionales, es que los laboratorios farmacéuticos han generado una "cultura de patrocinio" en torno a toda la cadena que conforma la comercialización de fármacos. Esto afecta a la autonomía de los profesionales sanitarios y la racionalización -o mejor dicho a la falta de la misma- a la hora de prescribir fármacos.
No sólo estamos hablando de que los visitadores médicos de las compañías farmacéuticas corrompen a los médicos con los regalos que les ofrecen a cambio de que receten sus productos, práctica ilegal, por cierto. Es que en España hoy se está comprando médicos directamente con dinero a cambio de recetas que demuestren que los galenos le han dado salida a los medicamentos del laboratorio sobornante. Esto, pese a las dificultades que conlleva poder probar dichos sucesos, conseguí publicarlo este año 2007 que termina, en la revista Discovery DSALUD.


La presión de los laboratorios ha abocado a la mayor crisis ética de la historia de la sanidad
La nueva plataforma contra la corrupción sanitaria y por la ética que está promoviéndose es una gran noticia para todo el ámbito de la salud y sobre todo para los ciudadanos. Y es que el año 2008 va camino de ser el de la publicación de códigos deontológicos, tan necesarios si se cumplen. Porque los hay que sólo sirven para figurar: está claro que el código deontológico de Farmaindustria -la patronal de los laboratorios farmacéuticos en España- que pretende velar porque no se soborne a los médicos se está incumpliendo.
Digo lo de los códigos deontológicos porque hace unas semanas la farmacéutica Roche publicó su código de relación con las asociaciones de pacientes. Viene esto a cuento del escándalo que supone que muchas de estas instituciones estén financiadas en todo o en parte por los laboratorios.
EFPIA, la patronal europea de farmacéuticas, también prepara un documento similar. Espero que lo utilicen más que el que tiene Farmaindustria sobre buenas prácticas en la promoción de medicamentos, ya citado.

La estrategia de promoción entre los médicos de ciertos laboratorios farmacéuticos es clara: dinero a cambio de recetas

Hoy mismo me he enterado que una institución pública como la Agencia de Evaluación de Tecnología e Investigación Médicas de Cataluña acaba de hacer público su Código de buenas prácticas científicas en la relación con la industria sanitaria. Urge profundizar sobre los conflictos de interés que rodean al sistema sanitario porque la salud de las personas no puede ser una mercancía.

lunes, 24 de diciembre de 2007

Más evidencias sobre el peligro de la radiación de los móviles

Diversas organizaciones de afectados por la contaminación electromagnética que despiden cables de alta tensión, antenas de telefonía y los propios teléfonos, estudian cómo "presentar en sociedad" el último informe que cuestiona los efectos para la salud de esta tecnología.
Hace unos meses se conoció un nuevo trabajo científico que eleva la preocupación sobre los efectos de los campos electromagnéticos de muy baja frecuencia en la salud humana. El estudio llama la atención sobre la necesidad de disponer de estándares más estrictos de seguridad de la telefonía móvil, las líneas eléctricas y otras fuentes de exposición en la vida diaria.
Los científicos responsables del trabajo piden que se apliquen criterios mucho más restrictivos de seguridad pública para reducir la contaminación electromagnética
El informe se conoce como "Bioiniciativa (Bioinitiative Report): Un fundamento sobre los estándares de exposición pública a los campos electromagnéticos basándose en la biología". Lo ha realizado un grupo de trabajo, Bioiniciativa, que reúne a científicos, investigadores y profesionales de las políticas de salud pública internacionales. En total, 14 expertos más doce críticos externos al trabajo.
La Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA) ha aportado a este informe un capítulo basado en un estudio de la propia institución: "Últimas lecciones de las primeras alertas: el principio de precaución 1896-2000".
Una de las principales conclusiones del Bioinitiative Report es que los estándares públicos de seguridad existentes, que limitan los niveles de radiación en casi todos los países del mundo, deben ser miles de veces más bajos.
Los actuales estándares de seguridad están obsoletos, urge reducir los niveles de exposición a los campos electromagnéticos
El informe ofrece detallada información científica sobre los impactos en la salud cuando los ciudadanos están expuestos a la radiación electromagnética cientos y miles de veces por debajo de los límites establecidos por instituciones como la ICNIRP (International Commission on Non-Ionizing Radiation Protection, Comisión Internacional de Protección contra la Radiación No Ionizante).
Esta agencia, dependiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS), mantiene estrechas relaciones con las compañías del sector eléctrico y de las telecomunicaciones, como desde hace años vienen denunciando los científicos críticos. En todo ello también profundiza nuestro libro Conspiraciones tóxicas.
Los autores de este nuevo estudio han revisado más de 200 análisis publicados sobre este tema.
Un móvil roto, paradoja de la pérdida de salud que podemos experimentar por su utilización
El experto de salud pública y coeditor del informe, el doctor David Carpenter, Director del Instituto de Salud y Medio ambiente de la Universidad de Albany, Nueva York, indica: "la exposición a largo plazo a alguna clase de campos electromagnéticos puede causar efectos graves en la salud". Añade que es necesaria una buena planificación de la salud pública para impedir cáncer y enfermedades neurológicas en la ciudadanía.
En próximos días desgranaremos qué situaciones de riesgo concretas para nuestra salud explica este informe. Un resumen en castellano del Bioinitiative Report puede consultarse aquí.